Las paredes de una casa son como la piel, por eso siempre mantenerlas en óptimo estado y prolijas es necesario para que tu hogar luzca como quieres.
Sin embargo, hay situaciones que afectan a tus paredes, y la humedad es una de ellas, ya sea por filtraciones o rotura de tuberías, al entra entrar en contacto con el agua de forma prolongada, empieza a dañarla y a macharla, dejándole una apariencia desagradable.
Antes que todo, te sugerimos primeramente que corrijas la causa de la humedad, si no lo haces solo estarás pintando y repintando sobre una pared enferma sin solucionar el problema de origen.
Todo vez que lo hayas solucionado, es momento de empezar a pintar sobre la pared húmeda siguiendo estos cuatros pasos para hacerlo con éxito.
1 – Secar por completo
Por supuesto, jamás debes pintar sobre una pared húmeda, es trabajo perdido. Así que lo primero que deberás hacer es secar bien la pared con la ayuda de un secador o un ventilador. Pesta atención al color de la macha, si es azulado o verdozo lo más seguro es que estpe infectada de hongos, así que tendrás que realizar un paso extra aplicando agua con lejía en la zona afectada.
2 – Primera mano
La mayoría de las persona cometen el error de pintar directamente, en este caso una pared con reciente humedad, con el mismo color de pintura. Si quieres que todo quede como si nada hubiera pasado, lo mejor es aplicar una primera mano con pintura blanca, será una base para aplicar el color que corresponde.
3 – Segunda mano
Toda vez que hayas dejado secar la pintura blanca como base, puedes proceder a aplicar la pintura del color de la pared. Hazlo con mucha suavidad y uniformidad para que quede perfecto.
4 – Impermeabilizar para proteger
Si gustas, puedes aplicar una capa impermeabilizadora para proteger la pared de posibles humedades, así no tendrás que hacer esto de nuevo sino corregir el problema de origen.