Ya sabemos que puede parecer un asunto bastante fácil, sin mayores problemas, pero la verdad es que si ya lo has hecho al menos una vez, sabrás que puede llegar a complicarse y acabar haciendo un desastre.
Latas usadas o nuevas, ambos casos es necesario abrirlos con cuidado y precisión, especialmente las que ya han sido abiertas, porque pasa que han sido cerradas de forma indebida, con pintura sobre los bordes de cierre y esto entorpece su apertura, sobre todo si llevan bastante tiempo cerrados.
Como verás, es también todo un arte abrir correctamente una lata pintura, pero te tenemos un truco bastante simple que te ayudará a hacerlo sin mayores riesgos.
El destornillador | Fácil, seguro y rápido
Es la única herramienta que necesitarás para abrir sin problemas tu lata de pintura. Lo que deberás hacer es colocar el destornillador en la orilla de la tapa, es decir, en la junta donde se encuentran la lata y la tapa y empezar a girarlo de forma circular por todo el borde para conseguir quitar los restos de pintura seca que se adhiere en este espacio. Hacer esto en principio facilitará mucho abrir la lata.
Ahora bien, una vez retirados los restos de pintura, procede a clavar el destornillador en la junta y haz palanca, con mucha suavidad por todo el borde hasta que la tapa finalmente la sientas suelta. Es importante que hagas esto con mucha delicadeza, de lo contrario podrías resultar un desastre y salpicar todo tu casa.
Ya con la tapa floja, con el destornillador en el borde y tu mano levántala con mucho cuidado, recuerda que la tapa estará llena de pintura por la parte de abajo.
Soluciones simples que te ayudarán a ahorra tiempo, dinero y limpieza también.